¿Y si América Latina construyera una central de datos satelitales compartida?

Reflexiones sobre el futuro de la observación de la Tierra en América Latina 

Una conversación con Ricardo Guerra

Siéntese con Ricardo Guerra, Director Regional de Ventas de Planet para América Latina, durante cinco minutos y seguramente surgirá el concepto de “colaboración”. Algunos días, puede parecer que se integra el equipo de casi 20 personas en los 51 países a los que sirve la empresa en la región. Otros, está visitando a agencias gubernamentales para encontrar puntos de conexión que puedan agrupar recursos e invertir conjuntamente en una central de datos satelitales para proyectos de mapeo y monitoreo.

Es apropiado, entonces, que nos reunamos con Ricardo en Brasilia en el primer Encuentro Nacional de Usuarios de RedeMAIS Que se llevó a cabo en el  mes de junio del presente año. Parte del proyecto operativo de teledetección más grande del país, Brasil MAIS, es un programa de más de 45.000 usuarios que abarcan 300 instituciones en los niveles federal, estatal y municipal de Brasil que se unieron para compartir no sólo cómo están utilizando mapas satelitales de todo el territorio brasileño también para encontrar formas innovadoras de abordar algunos de los desafíos más apremiantes del país y principalmente, encontrar puntos de conexión entre sus respectivas organizaciones y puedan usar en conjunto datos satelitales, de manera más eficiente. 

Con eso como telón de fondo, conversamos con Ricardo para conocer su opinión sobre la dinámica del mercado regional y su perspectiva sobre dónde está la industria de Observación de la Tierra (EO), y hacia dónde se dirige, en América Latina.

Ricardo, pasamos dos días escuchando a usuarios de datos satelitales del Programa Brasil MAIS del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, que es el proyecto operativo de teledetección más grande del país. Con tantos expertos geoespaciales en la sala, seguramente surgió una idea innovadora, colaborativa o ambas. ¿Cuál sería el proyecto o colaboración que estaría emocionado de ver que se haga realidad?

Me gustaría destacar los notables logros del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública a través de la Policía Federal y el Programa Brasil MAIS/Rede MAIS. Este programa ha sido un éxito absoluto y su impacto no puede ser exagerado. El compromiso y los esfuerzos de la Policía Federal han sido fundamentales para impulsar un cambio positivo.

El Programa Brasil MAIS ha dado un ejemplo notable de colaboración y coordinación efectiva entre diferentes partes interesadas. Ha demostrado cómo las operaciones conjuntas y las asociaciones pueden conducir a avances significativos en varios campos, incluyendo el monitoreo de la deforestación, la minería ilegal y otras actividades ilícitas. El enfoque del programa sirve como testimonio del poder de la cooperación y la importancia de aprovechar los recursos y compartir el conocimiento. 

Mientras reflexiono sobre los logros del Programa Brasil MAIS, no puedo evitar vislumbrar un futuro donde esta iniciativa ejemplar extienda su influencia más allá de nuestras fronteras. Creo firmemente que los beneficios de las operaciones conjuntas, como muestran Brasil y el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, pueden servir como modelo para nuestros vecinos sudamericanos. Al expandir el Programa Brasil MAIS, podemos fomentar un movimiento regional para mejorar los esfuerzos de monitoreo y combatir los desafíos criminales ambientales y todos sus desafíos. 

El impacto potencial de tal expansión es inmenso. Al trabajar en colaboración con los países vecinos, podemos abordar la deforestación, la minería ilegal y otras actividades ilícitas a una escala más amplia. Este esfuerzo no solo beneficiaría a Brasil, sino que también contribuiría al avance y bienestar de toda nuestra región.

¿Por qué ese proyecto sería novedoso o bienvenido en Brasil? ¿Y qué ejemplo podría dar a otros países de América Latina?

Uno de los indicadores más significativos del impacto del programa es la abrumadora respuesta de los profesionales. Con más de 45.000 usuarios y más de 300 instituciones participantes, está claro que el programa ha conectado tanto con individuos como con organizaciones por igual. Esta recepción entusiasta demuestra el valor que los proyectos colaborativos y financieramente conscientes tienen ante el ojo público. 

La esencia de la colaboración, que se encuentra en el núcleo del Programa Brasil MAIS/Rede Mais, debería servir como un ejemplo inspirador para nuestros países vecinos. Inicialmente, es crucial que las instituciones de cada país adopten la colaboración, el intercambio de datos y conocimientos entre ellas. Al superar las barreras y fomentar una cultura de colaboración a nivel nacional, podemos mejorar nuestras capacidades colectivas y abordar los desafíos que enfrentamos de manera más efectiva.

Sin embargo, es igualmente importante reconocer la necesidad de compartir información transfronteriza. Muchos de los problemas que encontramos en Brasil se originan en el extranjero, y viceversa. Por lo tanto, las operaciones conjuntas y la colaboración transfronteriza deberían ser un aspecto fundamental de nuestro futuro cercano. Esto es muy relevante para los gobiernos locales, quienes pueden aprender del ejemplo dado por el Programa Brasil MAIS/Rede Mais y aprovecharlo como un factor de motivación para mejorar los esfuerzos de colaboración a nivel internacional.

Retrocedamos y contextualicemos un poco.. ¿Cómo es actualmente la industria de observación de la tierra en América Latina? ¿Cuáles son algunos de los elementos únicos de América Latina que quizás no veamos con frecuencia en otras geografías? ¿Qué problemas suelen plantear los clientes potenciales y clientes al acercarse a usted?

¡Hay mucho de lo que podemos hablar aquí! Me centraré en tres: La gestión ambiental y preservación cultural, la agricultura y las iniciativas gubernamentales.

América Latina es el hogar de algunas de las regiones con mayor biodiversidad del mundo, como la selva amazónica y las islas Galápagos. Esta extraordinaria diversidad da lugar a una amplia gama de ecosistemas y recursos naturales que presentan desafíos y oportunidades únicos para las aplicaciones de observación de la tierra. La observación de la Tierra juega un papel crucial en el monitoreo y la conservación de estos invaluables ecosistemas, apoyando iniciativas relacionadas con la conservación, el manejo forestal y la preservación de la vida silvestre.

La agricultura es un sector económico importante en América Latina, con una producción a gran escala de cultivos como maíz, soja, café y caña de azúcar. La tecnología de observación de la Tierra brinda soporte vital para el monitoreo de cultivos, la estimación del rendimiento y las técnicas de agricultura de precisión, ayudando a los agricultores y expertos agrícolas a mejorar la seguridad alimentaria, optimizar la gestión de recursos y mitigar los riesgos asociados con el cambio climático.

Estos números y estrategias proporcionan una base para mitigar los riesgos del cambio climático en la agricultura en América Latina. Sin embargo, es importante adaptar estos enfoques a los contextos regionales y locales específicos dentro de cada país.

Por último, América Latina también es el hogar de diversas comunidades indígenas y un extenso patrimonio cultural. Las imágenes satelitales pueden apoyar el mapeo y monitoreo de áreas culturalmente significativas, preservar el patrimonio cultural y abordar los desafíos relacionados con la tenencia de la tierra, la gestión de recursos y el desarrollo sostenible en los territorios indígenas.

¿Cuáles son las nuevas y crecientes demandas de datos geoespaciales y sus aplicaciones? ¿Existen tendencias únicas o específicas para la región de América Latina que están impulsando estas aplicaciones?

Estamos viendo cada vez más demanda de datos geoespaciales en la gestión sostenible de recursos naturales. Ayuda en el monitoreo y manejo de bosques, recursos hídricos, depósitos minerales y hábitats de vida silvestre. Apoyo en los esfuerzos de conservación, el monitoreo de la biodiversidad, la planificación sostenible del uso de la tierra y la extracción responsable de recursos.

Un ejemplo de lo que está impulsando esta demanda es el fenómeno del Niño; el impacto puede extenderse a lo largo de varios meses y los efectos de este no se limitan a un solo año. La llegada de este fenómeno puede tener impactos significativos en la región. El Niño se caracteriza por el calentamiento del Océano Pacífico cerca del ecuador, lo que puede alterar los patrones climáticos y causar eventos climáticos extremos. El Niño está asociado con un mayor riesgo de desastres naturales en América Latina. Las fuertes lluvias pueden provocar inundaciones y deslizamientos de tierra, causar daños a la infraestructura, desplazamiento de poblaciones y pérdida de vidas. Las zonas costeras también pueden enfrentar un riesgo muy elevado de tormentas tropicales y huracanes.

Cuéntame sobre 1-2 de las aplicaciones más atractivas que ha visto de los clientes. ¿Qué tipo de resultados antes/después están viendo al usar datos satelitales?

Una de las mejores aplicaciones que he visto es usar datos de Planet para detectar y monitorear actividades de deforestación en diferentes regiones de Brasil. Alimentado a una plataforma que aprovecha la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático para detectar y generar alertas sobre cambios, el monitoreo satelital diario permite a nuestros clientes identificar áreas donde se está produciendo deforestación ilegal, lo que permite una intervención oportuna y llevar a cabo acciones de cumplimiento. También pueden detectar signos de operaciones mineras, como la presencia de maquinaria pesada o cambios en la cobertura del suelo, lo que les ayuda a ubicar sitios de minería ilegal y tomar las medidas de cumplimiento apropiadas. En algunos casos, estas imágenes satelitales pueden proporcionar evidencia visual que puede usarse en procedimientos en contra de personas u organizaciones acusadas de diferentes delitos ambientales. 

Otro gran ejemplo es el de Bolivia, donde nuestro cliente está utilizando nuestros datos para ayudar en la planificación del uso de la tierra y las actividades de zonificación. Al mapear y clasificar diferentes tipos de tierra y su idoneidad para diversos usos, pueden desarrollar planes de manejo de la tierra, designar áreas para la agricultura, la conservación o el desarrollo urbano, y garantizar prácticas sostenibles de uso de la tierra. La valiosa información derivada de nuestros datos respalda la toma de decisiones basada en la evidencia de nuestros clientes, permite una asignación efectiva de recursos y contribuye al desarrollo sostenible y la distribución equitativa de la tierra.

Con todas las diferentes administraciones gubernamentales y sistemas culturales en toda América Latina, ¿qué cree que se puede hacer para incorporar mejor los datos satelitales a nivel de políticas?

¡Esto es algo que discutimos mucho en el evento RedeMAIS! En lugar de utilizar datos satelitales dentro de un solo ministerio, creo que los gobiernos deberían explorar más proyectos a nivel nacional o regional como Brasil MAIS. Al juntar recursos e invertir conjuntamente en una central de datos satelital, por ejemplo, los gobiernos pueden lograr eficiencias en sus inversiones. Compartir tanto el precio como los recursos de talento, adquisición, procesamiento y almacenamiento de datos satelitales reduce los costos individuales de cada agencia o país participante. Esto permite a los gobiernos acceder a datos satelitales de alta calidad realizando un inversión menor en comparación con la adquisición individual.

Hay tres pasos críticos que se pueden tomar para incorporar mejor los datos satelitales a nivel de políticas en América Latina:

• Establecer mecanismos de intercambio de datos: los gobiernos pueden establecer mecanismos y protocolos de intercambio de datos para facilitar el uso de datos satelitales entre agencias y países. Esto puede implicar la creación de repositorios o plataformas de datos regionales donde los gobiernos puedan acceder, compartir imágenes, análisis y productos derivados de Planet.
• Implementar programas de desarrollo de capacidades: los gobiernos pueden invertir en programas de desarrollo de capacidades para mejorar las habilidades y el conocimiento de los formuladores de políticas, funcionarios públicos y expertos técnicos en la utilización de datos de observación de la Tierra. Se pueden organizar talleres de capacitación, seminarios e iniciativas educativas para familiarizar a las partes interesadas con las diferentes aplicaciones de los datos satelitales y cómo incorporarlos en los procesos de desarrollo de diferentes políticas.
• Promover la cooperación internacional: los gobiernos latinoamericanos pueden participar en la cooperación y asociaciones internacionales para aprovechar la experiencia y los recursos globales en la utilización de datos satelitales. Colaborar con organizaciones internacionales y agencias espaciales, por ejemplo, puede ayudar a los gobiernos a obtener financiamiento de iniciativas internacionales como el BID (Banco Internacional de Desarrollo).

Haciendo una transición desde el lado de la política hacia el lado de la industria ¿qué avances tecnológicos espera que lleven los datos satelitales al siguiente nivel? ¿Y cómo ve que esto ayude a resolver los desafíos que enfrentan los clientes latinoamericanos?

Los datos satelitales hiperespectrales pueden desempeñar un papel muy importante en el futuro, y creo que la próxima constelación de Tanager de Planet podría cambiar las reglas del juego. Las capacidades hiperespectrales pueden revolucionar la agricultura y el monitoreo de cultivos aquí en Latinoamérica, ya que la información espectral detallada puede ayudar en la evaluación de la salud de los cultivos, la detección de enfermedades, el análisis de nutrientes y el manejo preciso de los cultivos. Esto permite a los agricultores y las instituciones agrícolas optimizar los rendimientos, reducir el uso de recursos y tomar decisiones informadas para mejorar la producción de alimentos.

El mundo está observando lo que están haciendo los países amazónicos para combatir los crímenes ambientales y cómo pueden preservar estos ecosistemas ricos en carbono. Así que un tema relevante en los próximos años, especialmente cuando Brasil busca ser anfitrión de  la COP30 en 2025, será la capacidad de llevar a cabo la identificación de fuentes de carbono usando sensores hiperespectrales. Nuestra constelación de Tanager, por ejemplo, está destinada a ser capaz de detectar y diferenciar firmas espectrales asociadas con diferentes tipos de cobertura terrestre y vegetación. Al analizar datos hiperespectrales, puede ser posible identificar áreas con alta biomasa, como bosques densos y regiones ricas en vegetación, que son sumideros de carbono cruciales.

Pero la pregunta subyacente sobre todos estos datos orbitales es: ¿cómo usarlos? O al monitorear regiones masivas como la selva amazónica, ¿cómo saber dónde buscar? Es fundamental que sigamos desarrollando y trabajando con socios para crear técnicas avanzadas de análisis y procesamiento de datos para que los datos sean más fáciles de usar y entender. Esto incluye algoritmos para la extracción automatizada de funciones, modelos de aprendizaje automático para clasificación y predicción, y plataformas de procesamiento basadas en la nube para un análisis de datos eficiente.

Mientras mira los próximos 1-2 años, ¿qué es lo que más le entusiasma la OE en América Latina?

Estoy increíblemente contento y optimista de presenciar el aumento de la inversión en América Latina durante los próximos 1-2 años para controlar y mitigar el impacto de los desafíos ambientales como El Niño, las emisiones de carbono, la deforestación y las prácticas sostenibles en la agricultura. Estas iniciativas son vitales para garantizar la seguridad alimentaria y un futuro sostenible para todos.

La IA combinada con la tecnología geoespacial tiene el potencial de traer numerosos beneficios a América Latina, que van desde la respuesta a desastres hasta el  monitoreo del rendimiento de los cultivos y la gestión de recursos y energía . Por ejemplo, imagino cómo la IA combinada con los datos de observación de la tierra puede apoyar la planificación urbana y el desarrollo de infraestructura analizando datos espaciales, densidad de población, patrones de transporte y factores ambientales. Esto puede ayudar a optimizar los diseños de las ciudades, mejorar las redes de transporte, administrar los recursos de manera eficiente y mejorar la calidad de vida en las áreas urbanas. O, como algunos o nuestros socios ya están haciendo, puede contribuir a los esfuerzos de conservación ambiental monitoreando la deforestación, la pérdida de hábitat y las poblaciones indígenas. También puede ayudar en la identificación de áreas protegidas, puntos críticos de biodiversidad y áreas potenciales para la restauración de ecosistemas, facilitando estrategias de conservación efectivas .

A medida que enfrentamos las apremiantes realidades del cambio climático y sus consecuencias en nuestra región, es alentador ver que gobiernos, organizaciones y comunidades se unen para abordar estos problemas críticos. El reconocimiento de la importancia de las medidas proactivas y la asignación de recursos hacia el monitoreo ambiental y las prácticas sustentables es un importante paso adelante.

El compromiso y la inversión en estas áreas muestran una determinación colectiva de enfrentar los desafíos ambientales de frente. Estoy seguro de que con una mayor colaboración, intercambio de conocimientos y la utilización de tecnologías innovadoras, podemos lograr avances significativos en la creación de una América Latina más sostenible y resiliente.